lunes, 19 de noviembre de 2007

El lado oscuro del corazón

”Me importa un pito que las mujeres tengan los senos como magnolias o como pasas de higo; un cutis de durazno o de papel de lija.
Le doy una importancia igual a cero al hecho de que amanezcan con un aliento afrodisíaco o insecticida.
Soy perfectamente capaz de soportarles una nariz que sacaría el primer premio en una exposición de zanahorias.
Pero eso sí, y en esto soy irreductible, no les perdono bajo ningún pretexto que no sepan volar, si no saben volar pierden el tiempo conmigo”.






¿Para que poner más?

2 comentarios:

Alex dijo...

En la tienda Vintage, me compré una capa negra y un sombrero de ala ancha color verde.
La proxima vez, me haré con un gorro ruso.

Manuel Páucar González dijo...

Me gustó la película, a pesar de que la persona con quien la vi, me la contó íntegra más de tres veces, arruinándome el final, y tuve que callarla para que no siguiera estropeándome la experiencia.

Como libreto, debió haber sido una lectura fascinante.