Le doy una importancia igual a cero al hecho de que amanezcan con un aliento afrodisíaco o insecticida.
Soy perfectamente capaz de soportarles una nariz que sacaría el primer premio en una exposición de zanahorias.
Pero eso sí, y en esto soy irreductible, no les perdono bajo ningún pretexto que no sepan volar, si no saben volar pierden el tiempo conmigo”.

¿Para que poner más?
2 comentarios:
En la tienda Vintage, me compré una capa negra y un sombrero de ala ancha color verde.
La proxima vez, me haré con un gorro ruso.
Me gustó la película, a pesar de que la persona con quien la vi, me la contó íntegra más de tres veces, arruinándome el final, y tuve que callarla para que no siguiera estropeándome la experiencia.
Como libreto, debió haber sido una lectura fascinante.
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