miércoles, 28 de julio de 2010

Footprints on the Moon.



He vuelto.

He vuelto a los atascos, a las prisas de dos minutos tarde, a cronometrar los fallos de protocolo.

He vuelto a un Madrid en prisa y sin pausa. Me siento un poco perdida y confusa y ralentizada.

Aunque todavía no puedo decir que haya vuelto del todo.

Hay partes de mi que se han quedado en Africa y partes de mi que se van a Italia.

(Pienso en el electroplasma. En la huella que dejaban los fantasmas de Ghostbusters)

He dejado una sonrisa en Serengeti, una mirada en Nairobi, un arazaño en una carretera de Zanzibar, un abrazo en Mombasa, una pisada en Hide Park.

Dejo un rastro de miga de pan para que puedas seguirme.






Y vuelvo a oír el tren de mercancías pasar.

Y cantos extremeños por la mañana y café de cafetera.

Y maletas por todas partes, medio hechas, medio deshechas

Y muchas dudas y muchos planes de esbozo.

La que ha vuelto a Madrid, no fué la misma que se fué a Suiza hace ya más de dos años.

Tengo que aprender a conocerme de nuevo aqui.

Mientras tanto, sólo dejo que las cosas ocurran.


sábado, 3 de julio de 2010

Safari



Dos caminos se bifurcaban en un bosque amarillo,
Y apenado por no poder tomar los dos
Siendo un viajero solo, largo tiempo estuve de pie
Mirando uno de ellos tan lejos como pude,
Hasta donde se perdía en la espesura;

Entonces tomé el otro, imparcialmente,
Y habiendo tenido quizás la elección acertada,
Pues era tupido y requería uso;
Aunque en cuanto a lo que vi allí
Hubiera elegido cualquiera de los dos

Y ambos esa mañana yacían igualmente,
Oh, había guardado aquel primero para otro día!
Aun sabiendo el modo en que las cosas siguen adelante,
Dudé si debía haber regresado sobre mis pasos.

Debo estar diciendo esto con un suspiro
De aqui a la eternidad:
Dos caminos se bifurcaban en un bosque y yo,
Yo tomé el menos transitado,
Y eso hizo toda la diferencia

El camino no elegido. Robert Frost.